"Mi Reina,
Tu sola eres la Consolaciòn que Dios me donò,
la Guia de mi peregrinaciòn,
la fuerza de mi debilidad,
la dicha de mi miseria,
la sanaciòn de mis heridas,
el alivio de mis dolores,
la liberaciòn de mis cadenas,
la Esperanza de mi salvaciòn:
Escucha mis suplicas,
ten piedad de mis suspiros,
Tu que eres mi Reina,
el refugio, el auxilio, la vida,
la esperanza y toda mi fortaleza"
(Oraciòn de san Germano I Patriarca de Constantinopolis (660 c.-730).
AMDG et BVM