LA MUJER DEBÍA SER LA DULZURA DE DIOS EN LA TIERRA,
DEBÍA SER EL AMOR,
LA ENCARNACIÓN DE ESTE FUEGO QUE MUEVE A AQUEL QUE ES,
LA MANIFESTACIÓN, LA TESTIGO DE ESTE AMOR
La mujer debía ser la dulzura de Dios en la Tierra, debía ser el amor, la encarnación de este fuego que mueve a Aquel que es, la manifestación, la testigo de este amor. Dios la había dotado de un espíritu extraordinariamente sensible porque, cuando llegase a ser madre, supiese y pudiese abrir a sus hijos los ojos del corazón para que viese con amor a Dios y a sus semejantes, para que pudiesen estos entender y obrar. Piensa en la orden que Dios se dio a Sí mismo: "Hagamos a Adán una compañera". Dios que es Bondad, no podía sino querer hacer una buena compañera a Adán. Quien es bueno, ama. La compañera de Adán debía por eso ser capaz de amar para hacer feliz a Adán en su estadía en el Paraíso. Debía ser muy capaz de amar, de modo que debía ser la segunda después de Dios, así como su colaboradora y ayudadora en amar al hombre, creatura de Dios, de modo que aun en las horas en que la Divinidad no se manifestase a su creatura, el hombre al oír la voz de amor de Eva, no se sintiese infeliz por la falta de amor.
Satanás conocía esta perfección. Muchas cosas sabe Satanás. El es el que habla por los labios de los adivinos, que dicen mentiras mezcladas con verdad. Y si dice estas verdades, que odia porque es Mentira, lo hace sólo -y tenedlo en cuenta vosotros y quienes os sigan- para seduciros con la quimera de que no es la Oscuridad la que habla sino la Luz. Satanás, astuto, tortuoso, cruel, se ha arrastrado y ha entrado en esta perfección y allí ha dado su mordida, y dejado su veneno. La perfección de la mujer en el amar se ha convertido así en instrumento de Satanás para dominar a la mujer y al hombre, y así propagar el mal..."
"¿Entonces, nuestra madres?"
"Juan ¿tienes miedo de ellas? No todas las mujeres son instrumento de Satanás. Perfectas por su sentimiento, son siempre excesivas en el obras: ángeles si quieren ser de Dios, demonios si quieren ser de Satanás. Las mujeres santas, y entre ellas tu madre, quieren ser de Dios y son ángeles.
QUE RECIBIÓ LA MUJER?
TAMBIÉN EL HOMBRE PECO."
Maestro ¿no te parece que fue injusto el castigo que recibió la mujer? También el hombre peco."
"¿Y qué vamos a decir del premio? Está escrito que por la Mujer volverá el Bien al mundo y Satanás será vencido."
VED QUE LA VOZ DE UNA MUJER CANTARÁ PARA SIEMPRE
A FIN DE ACALLAR SUS AULLIDOS.
"No juzguéis jamás las obras de Dios, y esto como primera condición. Pensad que, como el mal entró por la Mujer, es justo que por la Mujer entre el Bien en el mundo. Hay que borrar la página que escribió Satanás, y lo hará el llanto de una Mujer. Y como Satanás aullará por toda la eternidad, ved que la voz de una Mujer cantará para siempre a fin de acallar sus aullidos."
"¿Cuándo?"
"En verdad os digo que su voz bajó ya del cielo donde por la eternidad cantaba su aleluya."
"¿Será más noble que Judit?"
"Más noble que cualquier mujer."
"¿Qué hará?"
OBEDIENCIA ABSOLUTA.
PUREZA ABSOLUTA.
HUMILDAD ABSOLUTA.
CON ESTO SE ERGUIRÁ, REINA Y TRIUNFANTE..."
"Vencerá a Eva en su triple pecado. Obediencia absoluta. Pureza absoluta. Humildad absoluta. Con esto se erguirá, reina y triunfante..."
"¿Pero no es tu Madre la más grande porque te engendró?"
"Grande es el que hace la voluntad de Dios. Por esta razón María es grande. Todos sus otros méritos le vienen de Dios. Por eso es suyo y por ello es bendita."
Todo termina.
Dice Jesús:
"Viste a un poseído del demonio. Hay muchas respuestas a mis palabras. No sólo para ti, sino para otros. ¿Servirán de algo? No. No servirán para los que tienen más necesidad de ellas. Quédate en mi paz."
VII. 685-693
A. M. D. G.